Después de un periodo de incertidumbre, TikTok ha sido restablecido en EEUU, pero su futuro sigue siendo incierto.
La popular plataforma de videos cortos, que cuenta con más de 170 millones de usuarios en el país, había sido suspendida debido a preocupaciones relacionadas con la seguridad de datos y posible influencia del gobierno chino.
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Sin embargo, la intervención del recién proclamado presidente de EEUU Donald Trump ha permitido que la aplicación vuelva a estar disponible, al menos temporalmente.
El pasado sábado, 18 de enero, muchos usuarios de TikTok en Estados Unidos se encontraron con la inesperada noticia de que la plataforma dejaría de funcionar debido a una ley federal. La misma obliga a ByteDance, la empresa matriz de TikTok, a vender sus operaciones en el país.
Esta medida se implementó en los últimos días del mandato de Joe Biden. Como se sabe, la administración saliente dejó la responsabilidad de su ejecución en manos del próximo gobierno.
Trump, quien asumió el cargo de presidente este lunes 20 de enero, anunció que emitiría un decreto para retrasar la aplicación de la prohibición por al menos 90 días.
“Emitiré un decreto el lunes para ampliar el periodo antes de que las prohibiciones de la ley entren en vigor, de modo que podamos llegar a un acuerdo para proteger nuestra seguridad nacional”, dijo Trump en una publicación de Truth Social el domingo.
Añadió que no responsabilizaría a los socios tecnológicos de TikTok, entre ellos Apple, Google y la empresa de computación en la nube Oracle. En concreto, por seguir poniendo a disposición la aplicación hasta que él firmara la orden.
La intervención de Trump ha sido vista como una estrategia para ganar tiempo. Pero sobre todo, para encontrar una solución definitiva al conflicto legal que enfrenta TikTok en Estados Unidos.
EL FUTURO DE TIKTOK SIGUE INCIERTO
Sin embargo, a pesar de la reanudación del servicio, el futuro de TikTok en Estados Unidos sigue siendo incierto.
La ley federal que exige la venta de las operaciones de TikTok en el país aún está vigente, y ByteDance deberá encontrar un comprador aprobado por el gobierno estadounidense para evitar una prohibición permanente.
Trump ha sugerido que un comprador estadounidense adquiera el 50% de la empresa y la gestione como una empresa conjunta con los actuales propietarios.
Sin embargo, no está claro si esta solución será aceptada por el Congreso y los miembros del propio partido de Trump.
