A partir del próximo 1 de julio, California (EEUU) marcará un antes y después en la forma en que los usuarios interactúan con plataformas de streaming como Netflix, Spotify y Hulu.
De acuerdo con lo reseñado por medios locales, la entrada en vigor de la ley AB 2863, firmada por el gobernador de California, Gavin Newsom, busca frenar las prácticas abusivas relacionadas con las suscripciones automáticas y servicios continuos.
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Esta normativa exige a las empresas mayor transparencia, claridad en la información y consentimiento explícito por parte del consumidor antes de realizar cualquier cobro.
Uno de los pilares de esta ley es la obligación de presentar de forma destacada todos los términos de la suscripción: desde la duración del servicio hasta el monto y frecuencia de los cargos, pasando por las políticas de cancelación y cualquier obligación mínima de compra.
Además, las empresas deberán ofrecer métodos de cancelación tan simples como el proceso de suscripción, eliminando trabas como llamadas telefónicas o navegación por múltiples páginas.
La AB 2863 también pone fin a los llamados “patrones oscuros”, esas estrategias de diseño que confunden al usuario o dificultan la cancelación.
Incluso en promociones o pruebas gratuitas, las compañías deberán obtener un consentimiento afirmativo antes de convertirlas en servicios pagos.
Esta medida busca proteger especialmente a los consumidores más vulnerables, quienes muchas veces caen en cargos inesperados por falta de información clara.
En caso de incumplimiento, las consecuencias no serán menores. La ley contempla sanciones significativas y otorga al Fiscal General de California y a los fiscales de distrito la facultad de hacerla cumplir.
Además, los consumidores afectados podrán presentar demandas para reclamar compensaciones por daños sufridos, lo que refuerza el carácter protector de esta legislación.
