La cadena de supermercado estadounidenses Whole Foods se está quedando con sus anaqueles vacíos y la situación genera incertidumbre entre clientes y empleados.
De acuerdo con las autoridades, todo se debe a un ciberataque masivo. Precisaron que la ofensiva digital afectó a United Natural Foods, Inc. (UNFI), el principal distribuidor de la cadena, provocando interrupciones en la entrega de productos esenciales.
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Asimismo, indicaron la falta de abastecimiento ha sido evidente en diversas sucursales, con secciones clave como congeladores y panadería completamente vacías.
La situación ha generado una ola de quejas y preocupación, mientras la empresa lucha por restablecer la normalidad.
El ataque forzó a UNFI a apagar sus sistemas como medida de precaución, lo que ha agravado el problema. Según su CEO, Sandy Douglas, la decisión se tomó para proteger la integridad de las operaciones mientras trabajan en la restauración.
Sin embargo, la incertidumbre persiste, y falta de comunicación sobre los tiempos de recuperación ha generado frustración entre los afectados.
La caída del sistema ha impactado no solo a Whole Foods, sino también a pequeños negocios que dependen de UNFI para su suministro.
CONSECUENCIA ECONÓMICAS
Las consecuencias económicas han sido inmediatas. Desde el anuncio del ataque, las acciones de UNFI han caído un 17 %, reflejando la preocupación del mercado sobre la capacidad de la empresa para cumplir con sus compromisos.
En tanto, en diversas tiendas de Whole Foods, empleados han compartido imágenes de congeladores vacíos. De hecho, se tuvieron que realizar tareas de limpieza profunda en espacios que normalmente estarían llenos de productos.
