Melissa Sotomayor, una madre hispana, denunció públicamente a la aerolínea estadounidense United Airlines por un incidente ocurrido durante un vuelo de Tampa a Newark (EEUU).
Según su relato, citado por Telemundo, la tripulación intentó obligarla a desconectar a su hijo de dos años del respirador y tubo de traqueotomía que necesita para vivir.
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Este equipo médico había sido previamente «autorizado» por la aerolínea, y Sotomayor contaba con la documentación necesaria para su uso a bordo.
Sin embargo, la tripulación insistió en que el equipo debía guardarse bajo el asiento antes del despegue, lo que generó una situación tensa y angustiante.
El niño, nacido prematuro con solo 22 semanas de gestación, depende de este equipo médico para sobrevivir. Sotomayor explicó que ya había utilizado el respirador en el vuelo de ida sin problemas, pero en el de regreso, la tripulación no mostró la misma comprensión.
A pesar de presentar cartas de autorización de dos médicos, la madre enfrentó resistencia por parte de los auxiliares de vuelo, quienes incluso sugirieron cambiarla de asiento.
La situación escaló cuando el capitán del avión intervino, argumentando que el equipo médico representaba un peligro para los demás pasajeros y para el propio niño.
Sotomayor refutó estas afirmaciones, mostrando documentos que confirmaban que el equipo cumplía con las regulaciones de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés). A pesar de esto, la madre se sintió «humillada» y desprotegida durante todo el proceso.
Tras la viralización del caso en redes sociales, United Airlines emitió una disculpa pública y aseguró estar investigando lo ocurrido. La aerolínea no dio más detalles.
Sin embargo, Sotomayor calificó la disculpa como insincera y expresó su frustración por la falta de empatía y preparación del personal de la aerolínea.
“Me sentí realmente molesta por la forma en que nos humillaron delante de los demás, por la forma en que nos hablaron”, aseguró Sotomayor por medio de un video.
“El capitán me habló como si yo estuviera poniendo en peligro a mi hijo a propósito, y no estaban dispuestos a escuchar que mi hijo dependía de este equipo para seguir con vida”, sostuvo.
