La trágica muerte de Keisy Fabiana Matos Delgado, una adolescente venezolana de 17 años, ha conmocionado a la comunidad en Dallas (EEUU).
Keisy fue asesinada a tiros en el estacionamiento de un complejo de apartamentos, después de que el presunto homicida, Frank Molina Pacheco, le disparara porque ella le negó un beso. Aunque el pistolero dice que fue un «accidente».
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Lo cierto, es que este incidente ha dejado a la comunidad venezolana, en el extranjero, en estado de shock y dolor.
El día del crimen, Keisy estaba cenando en su casa cuando un amigo cercano, conocido como «El Toro», la convenció de salir para encontrarse con Molina Pacheco.
Según versiones, Molina Pacheco estaba obsesionado con Keisy y había intentado besarla a la fuerza. Cuando ella se defendió mordiéndolo, él le disparó dos veces en el pecho. La joven luchó por su vida, pero lamentablemente no sobrevivió.
Asimismo, se indicó que las autoridades han detenido a Molina Pacheco, quien está preso con una fianza de 100.000 dólares. Sin embargo, «El Toro» sigue libre debido a la falta de pruebas en su contra.
La familia de Keisy ha expresado su indignación y dolor, exigiendo justicia para la joven y denunciando la falta de acción por parte de las autoridades.
Como es habitual en este tipo de casos, la comunidad venezolana en Dallas y en otras partes del mundo ha mostrado su apoyo a la familia de Keisy, compartiendo mensajes de solidaridad y condolencias en las redes sociales.
«Es un asesino, él no es nadie para arrebatarle la vida a otra persona, es un enfermo psicópata que por simplemente un no le disparó dos veces a mi prima sin imaginar el dolor que le estaba causando a una familia entera», concluyó la pariente de la víctima identificada como Valeria Colina.
