Por María Laura García
Nuestra salud en general depende del grado de acidez o alcalinidad de nuestro cuerpo, cuyo equilibrio no sólo depende de lo que comemos, sino de qué tanto descansamos, lo que pensamos y hasta de cómo o con qué nos hidratamos.
Repasando la teoría, “El pH” es una medida de la acidez o alcalinidad de una sustancia, y el del cuerpo se puede saber a través de la sangre, la orina o nuestra saliva. Su escala se mide del 0 a 14, siendo 7 el punto neutro, de 0 hasta 6.9 los ácidos y, a partir de 7 las bases o la alcalinidad. El pH del cuerpo es diferente en cada órgano; y no siempre debe ser de nivel 7. Cada parte del cuerpo tiene su propio equilibrio.
Les cuento la importancia de esto…
El “equilibrio ácido-básico” del cuerpo humano es esencial para mantener nuestra salud. Cuando elm organismo humano no puede equilibrar los niveles de ácido a través de sus mecanismos de regulación como lo son la respiración, la circulación sanguínea, la digestión, las funciones renales y más; pues aumentará su acidez y nos sentiremos sin energía, con sensación de frío, fatigados, sensibles, irritables, deprimidos, nerviosios, inflamados o tendremos nuestro sistema respiratorio congestionado con mucosidad.
También pueden endurecerse nuestros tejidos surgiendo por ejemplo la fibromialgia (dolor generalizado), la arterioesclerosis o muchos problemas degenerativos como el cáncer, la diabetes, etc..
¿De qué otras formas nos podemos enfermar? Puede darnos gota, reúma, artritis, poliartritis, artrosis, osteoporosis, acidez de estómago, úlceras, cálculos renales y de la vesícula, eccema, herpes, dolor de cabeza, migrañas y defensas bajas.
¿Cómo se acidifica el cuerpo?
El cuerpo se va volviendo ácido a partir de malos hábitos como los pensamientos negativos, la rabia, la violencia, el estrés, la fatiga, la falta de sueño, la mala oxigenación de las células y la falta de actividad física. Además, por comer alimentos alcalinos en relación a los acidificantes y comer en exceso general.
Entre los alimentos acidificantes están los lácteos, el vinagre, los azúcares refinados, alimentos procesados, el maní y sus derivados, el café, el alcohol y muchos más.
¿Cómo mantener una dieta más alcalina?
Una dieta más saludable debe estar compuesta por alimentos con un alto índice de alcalinidad. Entre ellos, debes incluir algunas frutas, hortalizas frescas, vegetales, legumbres (raíces y tubérculos), frutos secos, semillas, hierbas aromáticas, aceites como las del aguacate, coco, linaza y oliva; y beber suficiente agua.
Como ya lo escribí, el exceso de acidificación es el origen, lamentablemente de muchas enfermedades. Adicionalmente, conduce a la desmineralización y el cuerpo irá a buscar los minerales necesarios en los huesos, cartílagos y dientes dando lugar a la artrosis, osteoporosis y caries, por solo mencionar algunos de los posibles problemas.
Consulta con especialistas que hábitos de salud pueden mantener tu cuerpo en equilibrio.
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