A una madre de Ohio la acusaron de ser una asesina en serie debido a que organizó encuentros sexuales con varios hombres, los drogaba hasta la muerte para después robarles sus pertenencias.
Identificaron a la mujer como Rebecca Auborn, de 33 años de edad. La acusaron el miércoles pasado de cuatro cargos de asesinato por drogar fatalmente a «clientes» en Columbus. Los crímenes los perpetró en la primera mitad de este año, según el fiscal del estado, Dave Yost.
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También acusaron a Auborn de un quinto ataque en diciembre, pero por fortuna, la víctima sobrevivió.
«No compres sexo en Ohio, arruina vidas y podría costarte la tuya», añadió el fiscal. Asimismo, dice que sospechan que podría haber más víctimas.
«Para mí, si tienes a alguien que tiene una serie de asesinatos separados en el tiempo, es un asesino en serie. Tenemos el mismo modus operandi aquí», apuntó.
¿CÓMO SE DIERON CUENTA?
Los investigadores se dieron cuenta de esta serie de crímenes cuando una persona dejó una pista anónima, según la oficinal del fiscal.
La División de Policía de Columbus y la Oficina de Investigación Criminal de Ohio lograron conectar a Auburn con «varias sobredosis y robos». El mes pasado, la mujer había sido acusada, pero se declaró inocente de cargos de asesinato y drogas en la muerte de Josep Crumpler, de 30 años.
En dicho caso, hasta admitió que mezcló fentanilo, la potente droga zombi, en la pipa de crack de un hombre. Todo ello después de tener uno de sus encuentros sexuales, reseñó New York Post.
Afirmó además que sabía que el hombre tenía una sobredosis, pero que optó por tomar su auto y tarjeta de crédito.
La mujer es madre de un hijo, pero en 2016 murió una hija apenas a los 18 días de nacida. No poseía antecedentes penales.