El gobierno de Irán reconoció que sus instalaciones nucleares fueron “gravemente dañadas” por los recientes bombardeos llevados a cabo por Estados Unidos e Israel.
El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores del régimen iraní, Esmail Baghaei, admitió en declaraciones a la cadena Al Jazeera que los ataques ejecutados el pasado fin de semana dejaron secuelas profundas. “Nuestras instalaciones nucleares han resultado gravemente dañadas, eso es seguro”, afirmó, aunque evitó entrar en detalles técnicos.
Baghaei también señaló que Irán no ha tomado una decisión definitiva sobre su relación con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). “El proyecto de ley ante el Parlamento solo habla de suspender el trabajo con el organismo, no de ponerle fin. Irán está decidido a preservar ese derecho a la energía nuclear bajo cualquier circunstancia”.
Por su parte, Steve Witkoff, enviado especial del presidente Donald Trump a Medio Oriente, aseguró a Fox News que el bombardeo ocasionó “la destrucción total de la capacidad de enriquecimiento” de Irán. Según Witkoff, también se había cumplido el requisito previo que Teherán exigía para volver a las conversaciones: “Nadie se dispara. Se acabó”.
New Maxar satellite imagery reveals fresh damage at Iran’s Fordow nuclear site from Israeli airstrikes on June 23, 2025. The images show craters and destruction to access roads, tunnels, and support buildings. pic.twitter.com/QNJokN2fKn
— Open Source Intel (@Osint613) June 25, 2025
LEA TAMBIÉN: IRÁN ASEGURÓ QUE LA GUERRA CON ISRAEL YA TERMINÓ, AUNQUE ESTA FUE LA ADVERTENCIA QUE LANZÓ NETANYAHU
Durante la cumbre de la OTAN, al ser consultado por reportes que apuntan a que el programa nuclear iraní solo se habría retrasado unos meses, Trump se mostró burlón y tajante asegurando que la reconstrucción tomaría “años”. Esa línea la reiteró el portavoz militar israelí, el general de brigada Effie Defrin, quien afirmó que las instalaciones habían sufrido “daños significativos” y que el programa nuclear “lo había retrasado años”.
Donald Trump comparó el ataque a la planta subterránea de Fordow, epicentro del programa nuclear iraní, con los bombardeos nucleares de Hiroshima y Nagasaki. «Ese ataque puso fin a la guerra. No quiero usar el ejemplo de Hiroshima. No quiero usar el ejemplo de Nagasaki. Pero fue esencialmente lo mismo. Eso puso fin a esa guerra. Si no hubiéramos eliminado eso, estarían luchando ahora mismo».
Además, Trump destacó el papel de Israel en el trabajo de inteligencia que precedió a los ataques y señaló que su evaluación sobre los resultados será clave para comprender el verdadero alcance del impacto: “Hemos oído que fue una destrucción total”.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, confirmó que la operación utilizó “13.600 kg de explosivos y la capacidad de esas municiones, hubo devastación bajo Fordow”. Añadió que cada blanco recibió seis municiones, lo que generó una destrucción sin precedentes.
Hegseth también criticó a quienes minimizan el impacto del ataque. “Cualquier evaluación que indique lo contrario es especular con otros motivos”.