La Cancillería de Chile informó este domingo que un avión con 115 migrantes venezolanos partió desde la ciudad fronteriza de Arica a Venezuela, bajo el plan gubernamental «Vuelta a la Patria» del chavismo.
De esta forma, buscan sanar la crisis migratoria en la frontera Perú-Chile, donde aún se mantienen cientos de migrantes criollos y haitianos.
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En un comunicado, el Ministerio de Exteriores chileno dijo que los ciudadanos venezolanos «abordaron el vuelo» con total normalidad. Asimismo, cumplieron con los requisitos establecidos por el Consulado de Venezuela en ese país. Esto, en coordinación «con las autoridades nacionales pertinentes, y con apego a la legislación y normativa chilena, desde el enfoque de derechos humanos».
El vuelo lo llevó a cabo una aerolínea privada debido a que Conviasa está sancionada por EEUU. El avión partió desde Arica, a 2.000 km al norte de Santiago, hacia Caracas.
«Este resultado es consecuencia de las gestiones diplomáticas realizadas por la Cancillería para dar respuesta a la urgencia que se presentaba en la zona norte», añadieron.
El gobierno de Nicolás Maduro costeó el vuelo bajo el plan «Vuelta a la Patria».
Por último, la Cancillería de Chile sostuvo que seguirán con gestiones para concretar más vuelos de repatriación. «Y de esta manera, acoger la demanda de las personas que quieren regresar a su país de origen», apuntaron.
QUEDAN MÁS MIGRANTES EN LA FRONTERA
En la franja fronteriza Perú-Chile se mantienen más migrantes indocumentados, la mayoría de ellos venezolanos y haitianos. Dichos ciudadanos están varados en la Línea de la Concordia desde hace más de dos semanas, debido a que no pueden retornar a suelo chileno, pero tampoco ingresar a Perú y no cuentan con agua, comida o servicios sanitarios.
Ese embotellamiento de migrantes ocurre porque muchos de ellos no tiene la documentación necesaria para acceder. Por tal motivo, se mantienen en una situación irregular.
