Escándalo en Argentina: Grabaron al dueño de un local frotando las pertenencias de sus empleadas con sus genitales

Jhoan Melendez
Por Jhoan Melendez 3 Min de Lectura
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Foto: Cortesía

Un escandaloso hecho ha tenido lugar en Mar del Plata, Argentina, después que el depravado dueño de un local de bikinis fuera pillado frotando las pertenencias de sus empleadas con sus genitales.

El polémico caso de abuso y acoso laboral obligó a que se interpusieran denuncias contra el propietario del comercio por los actos indebidos. Las imágenes de una cámara colocada estratégicamente en el baño captaron el indignante hecho. En las imágenes, se ve a la persona registrar los bolsos de sus trabajadoras. Luego, logra sustraer varias pertenencias y las pasa por sus partes íntimas.

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El incidente sucedió el pasado 3 de diciembre en el local comercial «Anna Bikinis», informó el diario argentino Los Andes.

Tras el escandaloso episodio, una de las empleadas presentó una denuncia solo un día después de dejar al descubierto a su jefe. El 4 de diciembre, acudió a la Comisaría Nº 9 para iniciar el procedimiento sobre el caso, que se configuró como «averiguación de delito».

Actualmente, la Comisaría de la Mujer y Familia investiga al hombre por frotar sus genitales con los objetos de sus empleadas. Asimismo, trascendió que la mujer próximamente declarará para avanzar en el caso.

No obstante, no sería la primera vez que el aberrado sujeto se ve involucrado en casos de esta naturaleza. En 2016, grabó a una exempleada cuando estaba dentro del baño, según medios locales.

INDIGNACIÓN EN REDES SOCIALES

Luego que se viralizara el caso del dueño del comercio, su video frotando sus genitales en las pertenencias de sus trabajadoras no tardó en llegar a las redes sociales. Allí, cientos de usuarios expresaron su indignación y manifestaron estar asqueados por lo sucedido.

«Como se nota que las chicas ya estaban perseguidas. Para poner una cámara es porque algo sospechaban. Que horror», «¡Que enfermo Dios mío! Nunca vamos a imaginarnos hasta dónde puede llegar el ser humano», «Eso puede considerarse una agresión sexual», son algunas de las opiniones.

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