Un venezolano de 19 años se encuentra en estado crítico luego de perder ambos brazos tras el ataque de una jauría de perros en Bogotá, Colombia.
Los hechos ocurrieron cuando Greiber Eduardo Berrío regresaba a su hogar y los nueve animales salvajes se fueron contra él. Tras el ataque, lo trasladaron a un centro médico donde los galenos contaron 150 mordidas.
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Luego de amputar ambos brazos, lo internaron en la unidad de cuidados intensivos del Hospital de Kennedy, donde se debate entre la vida y la muerte.
“El médico reportó que mi hijo tenía más de 150 mordeduras de perro. Le arrancaron sus dos orejitas. La única parte que no le mordieron fue su parte íntima y los pies”, señaló su padre, Guillermo Berrío, a Noticias Caracol.
🇨🇴 TRAGEDIA EN BOSA
Una familia en el sur de Bogotá vivió una verdadera tragedia tras el brutal ataque que sufrió Greiber Eduardo Berrío, un joven de 19 años, a manos de una jauría de perros callejeros.
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— ImpactoVenezuela (@ImpactoVE) March 31, 2025
El padre de la víctima contó que los vecinos de la zona ya habían alertado a las autoridades sobre el comportamiento agresivo de los perros, que anteriormente atacaron a otras personas.
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“Cerca de la casa, anteriormente, pasó un caso parecido, similar a este, no de tanta magnitud, y la gente llamó, pero han hecho caso omiso. Con mi hijo ya van cinco personas mordidas”, afirmó.
En este sentido, expresó su frustración ante la falta de acciones por parte de autoridades locales para evitar que este tipo de tragedias sigan ocurriendo. “Si no lo hubieran auxiliado, los perros se lo hubieran comido”, agregó.
Hasta el momento, organismos de seguridad no se han pronunciado con respecto a este caso. “No, en ningún momento, nadie se ha comunicado ni nada. Ahí prácticamente no se ha podido hacer nada”, continuó el padre de Greiber Eduardo Berrío.
“Todo el mundo dice que los perros son de la calle, pero por más que de repente aparezca el dueño nunca va a decir que son de él, porque ya sabe el compromiso que se le viene”, continuó.
Por lo cual, insistió en el llamado para que las autoridades hagan algo con estos perros. “Agarren a esos animales, ya que de repente hoy fue mi hijo y mañana puede ser un niño que pase por ahí con una mamita o un papito y quién responde por eso”, concluyó.
Mientras tanto, la jauría ha seguido deambulando por la zona, ante el temor de muchos vecinos.
