Un escándalo sacude la política de Florida (EEUU) e involucra al congresista republicano Cory Mills, quien enfrenta graves acusaciones por parte de su expareja Lindsey Langston al denunciarlo por presuntamente amenazarla con difundir videos íntimos tras el fin de su relación.
De acuerdo con lo reseñado por la cadena estadounidense CNN, Langston, reconocida figura del Partido Republicano estatal y reciente ganadora del certamen Miss United States 2024, presentó la denuncia el pasado 14 de julio ante la Oficina del Sheriff del Condado de Columbia.
Leer Más
LEA TAMBIÉN: ALCOHOL, ARMAS Y NEGLIGENCIA: HOMBRE EBRIO NAVEGABA EN UN LAGO DE EEUU Y TODO TERMINÓ EN TRAGEDIA
Lo que se detalló, es que la mujer respaldó su denuncia con capturas de pantalla de mensajes atribuidos a Mills.
Según los documentos revelados por dicho medio de comunicación, los mensajes incluyen frases como: “Puedo enviarle videos tuyos también. Oh, todavía los tengo”, en referencia a un tercer desconocido.
En otra interacción, el número identificado como el de Mills agradece los supuestos videos, a lo que Langston responde: “¿No me has hecho suficiente daño?”.
La relación entre ambos se mantuvo fuera del ojo público hasta ahora, pero habría comenzado en 2021 y terminado en febrero de 2025.
La mujer, de 26 años, decidió terminar la relación luego de que el político, de 45, se viera involucrado en un escándalo relacionado con un supuesto altercado físico con otra mujer en su vivienda en Washington, D. C.
VIDEOS ÍNTIMOS Y AMENAZAS
Supuestamente, el congresista que representa al séptimo distrito de Florida, tras la separación, amenazó a su expareja con publicar en redes sociales videos explícitos de ella «si no retomaban la relación.»
Mills ha negado rotundamente las acusaciones, calificándolas como una “maniobra política” orquestada por Anthony Sabatini, su exrival en las primarias republicanas.
En declaraciones a medios como The Hill y ABC News, el congresista insistió que “estas afirmaciones son falsas y tergiversan la naturaleza» de sus «interacciones”.
Sin embargo, el contenido de los mensajes y la gravedad de las amenazas han generado una ola de cuestionamientos sobre su conducta y futuro político.
Debido a la delicadeza del asunto y en busca de orientación legal, Lindsey Langston asegura haber recurrido a Anthony Sabatini, exlegislador estatal de Florida. Situación, que también, condenó Mills.
«Anthony Sabatini está utilizando el sistema legal como arma para lanzar un ataque político contra el hombre que lo derrotó en las primarias. Usando su oficina legal corporativa para impulsar una narrativa basada en mentiras y argumentos legales defectuosos, todo para conseguir titulares políticos», sostuvo.
Aunque no se han presentado cargos formales contra Cory Mills, la investigación sigue en curso y podría tener implicaciones significativas en el año electoral.
En un contexto donde la imagen pública es crucial, este escándalo podría redefinir no solo la carrera del congresista. También puede dar un giro en el discurso sobre violencia digital y ética en la política estadounidense.
