En medio de un clima geopolítico cada vez más tenso entre Washington y Caracas, el almirante Alvin Holsey, jefe del Comando Sur de Estados Unidos (SOUTHCOM), realizó una visita oficial al buque de asalto anfibio USS Iwo Jima, desplegado en el mar Caribe.
La inspección, anunciada por el propio comando a través de su cuenta oficial en X, tuvo como objetivo observar las operaciones de la Armada y del Cuerpo de Infantería de Marina en la región, en el marco de las misiones antinarcóticos y de seguridad nacional que lidera el Departamento de Guerra de los Estados Unidos.
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Como se ha informado, la presencia del USS Iwo Jima en aguas caribeñas forma parte de una estrategia más amplia de patrullaje y cooperación con aliados regionales, que recientemente se ha reforzado con la incorporación del crucero de misiles guiados USS Gettysburg.
Según el SOUTHCOM, estas maniobras buscan interrumpir el tráfico ilícito de drogas y proteger los intereses estratégicos de Estados Unidos en el hemisferio occidental.
CONFLICTO CON VENEZUELA
Sin embargo, la visita de Holsey se produce en un momento particularmente delicado, marcado por acusaciones de Venezuela y observaciones de organismos internacionales sobre la legalidad de las acciones militares estadounidenses en la zona.

A través del canciller de Nicolás Maduro, Yván Gil, se denunció que los bombardeos contra pequeñas embarcaciones en el Caribe podrían constituir violaciones graves del derecho internacional.
Citando un informe de expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Gil afirmó que estas operaciones podrían ser consideradas crímenes internacionales, al «ejecutarse sin debido proceso judicial y en contravención de las normas marítimas y de derechos humanos».

RETIRO DE HOLSEY
En tanto, la reciente visita del almirante Alvin Holsey al buque USS Iwo Jima en el Caribe también se produjo poco después de que el secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, anunciara su retiro para finales de año, en un contexto marcado por supuestas y crecientes fricciones entre ambos líderes militares.

De acuerdo con fuentes consultadas por CNN, Hegseth habría expresado su descontento con el desempeño de Holsey, señalando que el jefe del Comando Sur no respondía con la celeridad ni la contundencia que él consideraba necesarias para enfrentar el narcotráfico en la región. Además, se habría quejado de una supuesta falta de acceso a información clave sobre las operaciones en curso.
Por tanto, la presencia del almirante en el Caribe, posiblemente sea una de sus últimas misiones antes de concretarse su retiro.

