Juan Felipe Froilán de Marichalar es el sobrino preferido del rey Felipe IV de España, pero también es el integrante de la familia real ibérica con mayor historial de peleas polémicas.
La última de ellas la madrugada del 27 de diciembre cuando al parecer estuvo presente (¿o implicado?) en una pelea con navajas.
«Yo, si soy algo, soy una víctima. Y ni eso. Soy un testigo de lo que ha pasado», dijo Froilán, a quien cariñosanmente su entorno familiar llama Pipe, al programa ahora Sonsoles.
«Yo estaba en la puerta de la discoteca cuando pasó una cosa y ahora me quieren involucrar a mí como si yo tuviera algo que ver con una pelea», reiteró.
LARGO HISTORIAL DE CONFLICTOS PARA PIPE
En la larga lista de conflictos de Pipe hay de todo, incluso un tiroteo. Sus desventuras coinciden en un mismo escenario: la noche, avivada por el exceso de alcohol y las luces de las discotecas. Siempre sazonado por el lujo, lo vive desde los palcos privados.
A sus 24 años, el hijo de Elena de Borbón se ha visto implicado en una discusión que tuvo lugar el pasado 25 de noviembre en la calle Goya de Madrid, cerca de la sala Vandido. El conflicto necesitó la actuación de la Policía, que inició investigaciones por un presunto delito de riñas, que conlleva a una pena de entre tres meses y un año de prisión, según lo reseñado por El Confidencial.
Froilan parece tener un imán para los problemas con la ley, lo que ha provocado quebraderos de cabeza a toda su familia. Ha estado siempre, aunque quizá por cuestiones de mala suerte, en el momento y en el lugar equivocados.
Ha vivido escenas tan desafortunadas como inverosímiles, de la talla de un tiroteo (que presenció en Marbella).
Fue hace tan solo unos meses, en agosto. Pipe estaba en la discoteca Opium Beach Club cuando comenzó la trifulca. Acabaron heridas cinco personas, cuatro de ellas por una bala.