La cantante Britney Spears aseguró que padece “daño cerebral” a raíz de experiencias traumáticas vividas durante el periodo más oscuro de su vida, mientras crece la polémica por el inminente lanzamiento de las memorias de su exesposo, Kevin Federline, tituladas You Thought You Knew.
A través de una publicación en sus redes sociales, la artista respondió con fuerza a los extractos filtrados del libro, en los que Federline describe supuestos episodios preocupantes de su convivencia y crianza de sus hijos.
En su mensaje, Spears recordó los meses finales de su tutela, haciendo referencia a su autobiografía The Woman in Me (2023). “Tuve una experiencia traumática donde, durante cuatro meses, no tuve mi puerta privada y se me obligó ilegalmente a no usar mis pies ni mi cuerpo para ir a ningún lugar”, dijo.
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La artista también aseguró que ese confinamiento afectó profundamente su mente y su salud física: “Mi cuerpo, mi lógica y mi conciencia como uno fueron asesinadas y destruidas al ciento por ciento”.
Britney Spears, de 43 años, explicó que no pudo bailar ni moverse durante cinco meses y que su recuperación comenzó gracias al movimiento. “Sé que mis publicaciones bailando pueden parecer ridículas, pero me ayudaron a recordar cómo volar”.
En un fragmento más revelador, la artista confesó que “siento que me quitaron las alas y me causaron daño cerebral hace tiempo, cien por ciento. Pero me siento afortunada de estar viva”.
¿QUÉ DIJO EL EXESPOSO DE BRITNEY SPEARS?
El exbailarín y padre de sus dos hijos, Sean Preston y Jayden James, sostiene en su libro que la cantante fue vista “mirando dormir a sus hijos mientras sostenía un cuchillo en la mano”.
También la acusó de consumir cocaína durante la lactancia y de presuntas agresiones físicas hacia su hijo mayor.
Britney Spears negó categóricamente todas las afirmaciones y cuestionó las motivaciones económicas de su exmarido.
“Si realmente amas a alguien, no lo ayudas humillándolo”, acotó. Además, añadió que teme por la manera en que estas historias puedan afectar a su familia. “La gente no tiene idea. Es mucho peor de lo que cualquiera podría imaginar”.
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En el mismo mensaje, la estrella del pop abordó la relación con sus hijos adolescentes, asegurando que ha sido una situación dolorosa. “Siempre he suplicado tener una vida alrededor de mis hijos. Me he sentido desmoralizada y ellos siempre fueron testigos de la falta de respeto de su padre hacia mí”.
Por su parte, Kevin Federline, de 47 años, declaró a Associated Press que decidió escribir el libro para “dejar constancia antes de que sea demasiado tarde”, afirmando que teme por la estabilidad emocional de sus hijos. “El tiempo se acaba y nos acercamos al límite. Algo malo sucederá si todo sigue igual”, afirmó.
Federline y Spears se casaron en 2004, tuvieron dos hijos y se divorciaron en 2007. Tras años de batallas legales y el fin de la tutela de la artista, él se mudó con los adolescentes a Hawái en 2023 junto a su actual esposa, Victoria Prince.