EN CARABOBO | Captaba a sus víctimas por Tinder, luego las drogaba para robarlas y extorsionarlas

Jhoan Melendez
Por Jhoan Melendez 3 Min de Lectura
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El Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) detuvo a un hombre en Carabobo debido a que captaba a sus víctimas por la aplicación de citas Tinder, para luego drogarlas, robarlas y hasta extorsionarlas.

Douglas Rico, director de ese cuerpo, indicó que tras un intenso trabajo de investigación pudieron ubicar y capturar al responsable. Se trata de Arnaldo José Marín Utrera, de 28 años.

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El hombre contactaba a las personas por Tinder para acordar un encuentro en la casa de las víctimas. Luego de esto, las drogaba con un medicamento y allí aprovechaba para llevarse los artículos de valor, incluso vehículos.

Una vez que las víctimas se percataban, lo llaman y este les exigía una alta suma de dinero para devolver las pertenencias.

Marín fue detenido en la urbanización Los Libertadores de la parroquia Güigüe, municipio Carlos Arvelo. En el lugar se recuperó un vehículo Chevrolet Optra y otros artículos, además del fármaco empleado para dopar a las víctimas.

Por estos robos las autoridades buscan a Oswaldo Daniel López Tovar, de 24 años, quien trabajaba con Marín en estos delitos.

El arrestado fue puesto la orden de la Fiscalía 36º del Ministerio Público.

DETENIDOS EN ANZOÁTEGUI POR DROGAR Y ROBAR TAMBIÉN

En Anzoátegui ocurrió un hecho similar. Efectivos del Cicpc desarticularon la banda delictiva «Los Burrudangueros» que se dedicaba a drogar a las víctimas para despojarlos de sus pertenencias en Anaco.

Rico, sostuvo que los delincuentes tenían un radio de acción delictiva en la Avenida Portuguesa, municipio Anaco. Precisamente, adyacente a varios establecimientos comerciales.

«Allí visualizaban a sus víctimas, preferiblemente mujeres que transitaban solas, para hacerse pasar como ganadores de tickets de lotería. Sin embargo, por distintos problemas, no pueden cobrarlos, por lo que le solicitan a las víctimas, que los ayuden», expresó.

Rico acotó que por la ayuda los delincuentes le prometían a las víctimas que les entregarían «un porcentaje de lo que se habían ganado».
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