Contrató a una trabajadora sexual, discutieron por el pago y todo terminó en tragedia, esto hizo con el cuerpo de la mujer

Angel David Quintero
3 Min de Lectura
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trabajadora

Un hombre identificado como Jonathan Martins, de 29 años asesinó a una trabajadora sexual que respondía al nombre de Ana Clara García Veloso, de 19 años, cuyo cuerpo apareció este lunes por la mañana frente al portón de la casa de él en la ciudad de Ubá en Brasil.

El cuerpo de la joven presentaba múltiples moretones y estaba envuelta en una manta. Cámaras de seguridad los habían registrado horas antes caminando juntos por la calle.

Según el comisario Giovane Rodrigues de Faria Dantas, Ana Clara estaba de paso en la ciudad y agendaba encuentros a través de aplicaciones. Había alquilado una suite a una vecina, que ya declaró, al igual que un vecino del acusado y el propietario del inmueble donde vivía Martins.

El detenido admitió que acordaron un servicio sexual por 700 reales, unos 130 dólares, pero quiso pagar en cuotas y la discusión escaló hasta el crimen. Después, arrastró el cuerpo hasta la entrada de su casa, lo dejó allí y siguió su rutina laboral, un detalle que la policía calificó de “frialdad desconcertante”.

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Para los investigadores, el caso se configura como femicidio porque la agresión estuvo ligada a la condición de mujer de la víctima. En chats previos al encuentro, la trabajadora sexual expresó a una amiga el temor que le generaba Martins: “Tiene fetiches muy locos, pero me ofreció 700 reales, así que me voy. Si muero…”.

Tras hacerse público el caso, dos mujeres reconocieron al acusado y declararon contra él. Una adolescente de 16 años aseguró mantener una relación con Martins, mientras que otra mujer, de 36, lo denunció por acoso, con ofrecimientos de dinero y amenazas cuando se negó.

Además, la policía de Minas Gerais informó que el detenido es oriundo de Volta Redonda, Río de Janeiro y que habría llegado a Ubá huyendo de señalamientos por un homicidio ocurrido en junio en su ciudad natal.

Jonathan Martins permanece preso en el presidio de Ubá mientras continúa la toma de testimonios y los análisis forenses.

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