Un crimen atroz cometido por un cubano y ocurrido en Dallas, en Texas (EEUU), ha desatado una nueva ola de controversia en torno a la política migratoria de Estados Unidos.
De acuerdo con El Nuevo Herald y otros medios, el cubano responde a la identidad de Yordanis Cobos-Martínez, de 37 años, quien terminó arrestado tras decapitar con un machete a Chandra Nagamallaiah, trabajador de un motel, frente a su esposa e hijo.
LEA TAMBIÉN: TRIBUNAL DE APELACIONES AUTORIZÓ A INTERRUMPIR EL «PAROLE HUMANITARIO« PARA MIGRANTES DE CUATRO PAÍSES, INCLUIDO VENEZUELA
El ataque se produjo luego de una discusión por el uso de una lavadora rota, según documentos policiales. La víctima le dijo al migrante que no podía usarla y esto desató la furia que culminó en su cruel asesinato.
DETALLES PERTURBADORES
De acuerdo con la declaración jurada, Nagamallaiah realizaba labores de limpieza en una habitación junto a otro trabajador, quien le indicó a Cobos-Martínez que la lavadora estaba dañada y no podía utilizarse.
Según el documento, Cobos-Martínez se molestó al ver que Nagamallaiah recurría a un testigo como traductor y lo agredió. El ataque se produjo frente a la esposa y el hijo de Nagamallaiah, quienes trataron de detenerlo sin éxito.
El sospechoso continuó –según versiones– atacando brutalmente al trabajador con múltiples cortes hasta decapitarlo. Posteriormente, le dio dos patadas a la cabeza, la arrojó hacia el estacionamiento y, tras recogerla, la depositó en un contenedor de basura.

REACCIÓN DE TRUMP
El caso ha sido calificado como “asesinato en primer grado” y generó de inmediato una fuerte reacción por parte del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
“¡No se preocupen, que bajo mi liderazgo, se acabó el tiempo de ser laxos con estos inmigrantes ilegales!”, escribió Trump en Truth Social sobre el asesinato en Dallas.
Trump aprovechó el incidente para reforzar su postura sobre la migración ilegal, señalando que este tipo de crímenes son “completamente evitables” si se aplicaran medidas más estrictas.
El mandatario también criticó —como es habitual— al gobierno del expresidente de EEUU Joe Biden por haber liberado a Cobos-Martínez en enero, a pesar de que tenía una orden de deportación. Lo más complicado, es que Cuba, como en otros casos similares, se negó a recibirlo debido a sus antecedentes penales.
DEPORTACIONES A TERCERO PAÍSES
Sin embargo, se sabe que la administración Trump ha respondido con una política migratoria de mano dura para ese tipo de casos, que incluye deportaciones a terceros países como Esuatini, Uganda, Sudán del Sur o incluso la prisión de máxima seguridad CECOT en El Salvador.
Según la subsecretaria de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, estos acuerdos buscan evitar que criminales violentos permanezcan en territorio estadounidense.
“Esta es exactamente la razón por la que estamos deportando a extranjeros ilegales delincuentes a terceros países… Si alguien viene a nuestro país ilegalmente, podría terminar en Esuatini, Uganda, Sudán del Sur o CECOT”, dijo la funcionaria.
DETENCIÓN DE COBOS-MARTÍNEZ
De acuerdo con la declaración jurada, agentes del Departamento de Policía de Dallas arrestaron a Cobos-Martínez cuando intentaba huir, ensangrentado y con un machete en la mano.
La Fiscalía informó a dicho medio de comunicación que no ha presentado cargos formales y no suele emitir comentarios sobre investigaciones en curso.
Actualmente, Cobos-Martínez permanece recluido en la cárcel del Condado de Dallas, señalado públicamente bajo la acusación de asesinato, según los registros oficiales.
ANTECEDENTES Y «ENFERMEDAD MENTAL»
Según el Departamento de Seguridad Nacional, sus antecedentes penales en Estados Unidos incluyen abuso sexual infantil, hurto mayor de un vehículo, privación ilegal de la libertad y robo de vehículo.
Otro dato importante lo aportó Odalys Martínez Rodríguez, madre de Cobos Martínez, quien rechazó las acusaciones en contra de su hijo en declaraciones a Martí Noticias, medio perteneciente al gobierno de Estados Unidos.
En concreto, afirmó que su hijo emigró en 2016 y desde entonces ha lidiado con problemas de salud mental.