Ashley Ways, la tiktoker que quedó detenida hace pocos días tras burlarse de la muerte de una señora con cáncer, quien era madre de otra creadora de contenido con la que rivalizaba, habría salido de la cárcel bajo un régimen de presentación de cada 30 días.
Trascendió que la adolescente además deberá cumplir con una serie de medidas. Una de ellas sería la asistencia a consultas psicológicas.
La información extraoficial la dio a conocer el diario local Yaracuy al Día. Fue en esa entidad donde se suscitó el hecho. Ese medio señaló que el caso se ha manejado con total hermetismo.
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Sin embargo, en días recientes, se llevó a cabo una audiencia en el Circuito Judicial de San Felipe y allí se le notificó que la excarcelarían. Esto gracias a que el tribunal acordó una revisión de la medida de privativa de libertad que posaba sobre la tiktoker. Gracias a ella, ahora la menor de edad está en casa con su familia desde el fin de semana pasado.
Una fuente dijo a ese diario que entre las medidas también está la de prohibición de salida del país. Además, tampoco podrá hacer uso de sus redes sociales.
CRONOLOGÍA DEL CASO ASHLEY WAYS
La tiktoker resultó detenida el pasado 25 de febrero por agentes de la PNB, quienes la pusieron a la orden de la Fiscalía 79 del Ministerio Público.
En un video, el cual eliminó poco después, la menor se burlaba de la muerte de la madre de otra tiktoker, con la cual tenía una aparente rivalidad. En la primera parte del clip se le ve burlándose de una publicación que subió la hija de la fallecida.
Posteriormente, entre burlas y mofas, escaló aún más su indiferencia por el dolor de la familia de la mujer.
«Falleció la mamá. Una vez más, demostrando que yo tenía razón. Te dije que estuvieras pendiente de tu mamá en lugar de estar pendiente de mi vida», dijo la adolescente.
Tras el arresto, su padre pidió una audiencia con el fiscal general, Tarek William Saab, para hablar de las condiciones de confinamiento en las que estaba su hija.
El padre de la menor abogó por comprensión hacia su hija y una revisión del castigo, pues consideró que la joven no es una criminal y por lo tanto no se justifica el trato que estaba recibiendo.
De acuerdo con lo replicado en medios de comunicación, Ashly Ways estaba durmiendo en el piso de una celda. Además, estuvo recibiendo múltiples amenazas de muerte, lo que generó un gran impacto emocional en su familia.
