Los Simpson, además de ser uno de los programas de televisión más icónicos (con más de 35 temporadas al aire), se ha caracterizado por ser muy asertivo en sus predicciones y ahora está a punto de convertirse en realidad una escena perteneciente a un capítulo de su temporada 11, emitido en el año 2000.
En dicho episodio destacó una escena que parecía una parodia de la ciencia ficción. En ella, Homero, ya anciano, usaba un casco de realidad virtual para disfrutar de comida digital.
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Veinticuatro años después, esta idea de los Simpson podría dejar de ser ficción, ya que unos científicos en Hong Kong desarrollaron un dispositivo que permite experimentar sabores en un entorno virtual. Esto marcaría un hito en la evolución de la tecnología sensorial.
«CHUPETA ELECTRÓNICA»
El dispositivo, presentado en un estudio publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences, es una especie de «chupeta electrónica» que emplea estimulación iónica y geles hidratados para recrear sabores.
Con un peso de apenas 15 gramos y un diseño portátil similar a una colombina, el sistema permite a los usuarios «probar» sabores sin necesidad de alimentos físicos, según reseñó el medio La FM.
Dicho dispositivo utiliza un proceso conocido como iontoforesis, que traslada compuestos químicos de sabor a través de hidrogeles seguros mediante un flujo controlado de iones.
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Equipado con una batería de ión-litio y tecnología inalámbrica, el aparato genera sabores básicos y complejos al entrar en contacto con la lengua del usuario. Además, puede intensificar la experiencia mediante la inclusión de aromas específicos.
Su diseño es altamente innovador. Su carcasa, fabricada con impresión 3D en nylon, alberga componentes miniaturizados distribuidos en dos capas de circuito impreso ultrafino. Los sabores disponibles incluyen azúcar, sal, ácido cítrico, cereza, leche, té verde, parchita, durián y pomelo.
El desarrollo de esta tecnología no solo amplía las posibilidades de la realidad virtual, sino que también redefine cómo interactuamos con los entornos digitales.
Este dispositivo no solo muestra el potencial de la tecnología sensorial, sino que también subraya cómo la imaginación, alimentada por la ficción, puede inspirar innovaciones que transforman nuestra relación con el mundo.
