El profesor Evan Ellis, un experto clave que asesoró al equipo del presidente electo Donald Trump en su primer mandato, vaticinó que pese a los esfuerzos de convencer al empresario de hacer las paces con Nicolás Maduro, su administración retomará la política de ‘máxima presión’ contra el Gobierno del líder chavista.
“Muy rápidamente, después de (la inauguración), vamos a ver una ola de sanciones introducidas por el equipo de Trump. Van a ser mucho más fuertes que las adoptadas bajo el presidente Biden”, pronosticó.
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Ellis, quien formó parte del equipo que asesoró sobre Venezuela al exsecretario de Estado, Mike Pompeo, destacó que las personas que rodearán a Trump en materia de política exterior, son todos de «línea dura», con «un amplio conocimiento» sobre los «peligros» que suponen en el hemisferio los Gobiernos de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
En un foro virtual, el experto hizo énfasis en la designación de Marco Rubio como secretario de Estado. El senador por Florida ha sido un acérrimo crítico de las administraciones de Venezuela y de Cuba.
NO DESCARTA UN «ARREGLO» DE PETRÓLEO POR MIGRANTES
Por otro lado, el experto se refirió a un reportaje de Wall Street Journal, donde se menciona que los empresarios le sugieren a Trump mantener el mercado de crudo abierto hacia Venezuela. Ellis aseveró que no se puede descartar un «arreglo», especialmente porque la prioridad del presidente electo es deportar masivamente a migrantes ilegales.
Sin embargo, acotó que las posibilidades de ello son bajas.
«Sí, hay ciertas personas con interés en transacciones de petróleo que le están diciendo a Trump, que debemos levantar las sanciones. Son un pequeño grupo de personas que van a jugar golf con él en Mar-a-Lago, y que le susurran eso en el oído», reconoció Ellis.
Sin embargo, mencionó que quienes rodean a Trump en su gabinete, están claros del «terror» que supone pactar con Maduro.
«Yo admito que hay una posibilidad de que se realice una negociación, no la descarto. Pero si tuviese que apostar mi propia plata, yo la apostaría en que se va a adoptar una política de mano dura», adelantó.
