Una familia venezolana que hacía escala en Colombia antes de partir a Qatar, pasó un amargo momento al ser víctimas de un robo a mano armada.
Residenciados en Caracas, decidieron que antes de arribar a Qatar querían conocer Bogotá y Cartagena. Por ello, la familia conformada por el hombre, su pareja e hijo alquilaron un carro para ir a la frontera.
Sellaron sus pasaportes a la salida de su país y al ingreso a Colombia. Llegaron a Cúcuta y desde allí abordaron un vuelo hasta el aeropuerto El Dorado. Se subieron a un taxi y comenzaron a sentir el temor de la inseguridad capitalina.
“Estaba sentado junto a la ventana utilizando mi celular y el conductor me dijo que lo guardara, porque podían romper el vidrio y quitármelo. Nunca pensé que eso pudiera pasar en Bogotá”, le contó Albert a Noticias RCN.
Al llegar al hotel le dio a su esposa un millón de pesos en efectivo para hacer algunas compras y 200 mil a cada uno de sus padres, quienes los acompañarían hasta Cartagena.
EMPEZÓ LA PESADILLA
La mujer salió a la calle junto a sus suegros para ir caminando a hacer las compras.
No obstante, no se imaginaron lo que estaba por pasar. Dos hombres con armas de fuego los acorralaron en un callejón, les pusieron las pistolas en la parta baja de sus espaldas y los obligaron a abrir sus bolsos. Robaron todo el dinero y se fueron.
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“Recuerdo que uno de los asaltantes tenía un tapabocas con una bandera de Colombia. Luego nos dijeron que también hay muchos venezolanos que cometen atracos en Bogotá. Lo cierto es que nunca pensamos estar en peligro allí”, relató la mujer.
“Cartagena sí nos gustó demasiado”, complementó el hombre que por seguridad no quiso revelar su identidad.
SIGUE LA TRAVESÍA
A pesar del mal rato la familia arribó a su siguiente destino, Madrid, España, donde esperan olvidar el traumático robo.
A partir de ahora en lo único que quieren pensar es en la experiencia que vivirán en Qatar y los lugares que les falta por descubrir.
Antes de llegar a Doha, irán al Camp Nou de Barcelona a sentir de cerca el mito Messi.
Después viajarán a Dubái a conocer la piscina más alta del mundo y desde ahí él y su familia se subirán a un avión que los llevará al Mundial.