En Seattle (EEUU), solicitantes de asilo ruegan por ayuda en medio de nuevas medidas adoptadas por el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden.
De acuerdo con un reporte de The Seattle Times, los solicitantes de asilo se trasladaron el pasado sábado a un motel vacío al sur de Seattle en Kent. En concreto, exigieron que se reabriera para poder alojarse en el sitio.
LEA TAMBIÉN: AMLO BUSCARÁ ACUERDO CON BIDEN PARA QUE MIGRANTES NO SEAN DEVUELTOS A MÉXICO
Lo que se sabe, es que se trata de un motel propiedad del condado King. Se utilizó como centro para que las personas sin hogar hicieran cuarentena si contraían COVID-19 durante la pandemia.
Algunos de los solicitantes de asilo que acampan en el sitio habían sido alojados en una iglesia en el suburbio cercano de Tukwila, que está abarrotado. Mientras que otros perdieron su alojamiento temporal, en moteles o viviendas alquiladas, cuando expiró el 1 de junio.
El mencionado medio de comunicación detalló, que la mayoría de estos migrantes, son de Angola, Congo y Venezuela. Todos argumentaron que salieron de sus países debido a la violencia y crisis económica. Así se lo manifestaron a KOMO-TV, una televisora local.
“Nos gustaría que el gobierno nos ayudara y asistiera”, dijo Chibuzo Robinson, quien es de Nigeria. “No tenemos ningún lugar donde quedarnos”, agregó el migrante.
ASILOS LIMITADOS
En tanto, Biden anunció y confirmó que se limitará el asilo a migrantes irregulares en su frontera con México.
Durante una rueda de prensa, el mandatario demócrata enfatizó que los migrantes solo podrán recibir asilo en la frontera sur si lo hacen de una forma legal.
De acuerdo con el comunicado compartido con la prensa este martes, las nuevas disposiciones «no son permanentes» y se suspenderán cuando el número de cruces irregulares sea «lo suficientemente bajo». Así como el mismo permitan el procesamiento seguro y “eficaz” en los puertos de entrada.
«Estas acciones estarán vigentes cuando la frontera sur se vea abrumada y harán más fácil para los oficiales de inmigración expulsar rápidamente a las personas que no tienen base legal para permanecer en EEUU», indicó la Casa Blanca.
Las restricciones entrarán en vigor de inmediato y se activarán cuando el promedio semanal de encuentros en la frontera supere los 2.500 diarios. Se detendrá cuando los arrestos caigan por debajo de 1.500 por día.